«Queremos conseguir los doce puntos», afirmó tras el partido contra Colombia Mario Salas, el técnico de Chile, que este martes completará ante Paraguay sus compromisos del Grupo A, en el que antes venció, en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, al dueño de casa (1-0) y a Bolivia (2-0).

Salas dijo que el objetivo de ganar los 12 puntos no se contrapone con la posibilidad de dar descanso a algunos titulares frente a Paraguay (20:00 horas), porque dada las características de la plantilla cree que jugarán «de la misma forma».

Frente a Colombia, y al igual que anteriormente ante Argentina, la «Rojita» terminó con nueve hombres, por las expulsiones de Cristián Cuevas, uno de sus goleadores y del arquero Darío Melo, que al estar los cambios completos debió ser sustituido por el volante Franco Ragusa.

En medio de las alabanzas que copan este lunes las páginas de los diarios de Santiago, la prensa deportiva chilena advierte sobre la cantidad de tarjetas que, con su juego «apasionado antes que violento», acumula el equipo de Salas.

«Fuimos más equipo que Colombia», manifestó el técnico Salas, para quien se ganó «con una mezcla de coraje y buen fútbol». «Con las expulsiones el partido se desvirtuó un poco, como con Argentina. Ahí salió el coraje, la actitud, lograron sacar el partido adelante de manera espectacular», analizó el técnico, que se inspira en el Che Guevara para motivar a sus dirigidos.

«Ante Argentina fuimos un equipo de guerreros; con Bolivia implementamos el buen fútbol y ahora hemos vuelto a tener a estos guerreros», remató Salas, para quien, si ambos factores «se transforman en una constante, se da una mezcla que nos puede llevar a grandes triunfo».

Según los analistas locales, las claves del buen desempeño que hasta ahora mostró la «Rojita» en Mendoza fueron la solvencia defensiva, el buen juego en el medio, tanto para atacar como para replegarse y la eficacia ofensiva.

En ese contexto, los medios destacan especialmente al arquero Darío Melo, los centrales Valber Huerta e Igor Lichnovsky, el armador Bryan Rabello y a los delanteros Cristián Cuevas y Nicolás Castillo.

Los jugadores, si bien se mostraron felices por lo hecho hasta ahora, trataron de evitar el triunfalismo y pusieron el énfasis que aún no ganaron nada y que falta mucho camino por recorrer en el Sudamericano.

«Clasificamos al hexagonal, pero hay que estar tranquilos porque aún hemos ganado nada. Queda lo más importante, que es llegar al Mundial de Turquía», ejemplificó Igor Lichnovsky, el capitán del equipo y autor del segundo gol chileno ante Colombia.