Ante las críticas de algunos legisladores (Arnoldo Wiens, y Fernando Silva Facetti) sobre la “actitud tibia” y hasta favorable del Poder Ejecutivo paraguayo hacia la instalación de una planta de procesamiento de uranio y una planta nuclear, en Formosa (Argentina), el canciller nacional, Eladio Loizaga anunció ayer que conversará con el ministro argentino de Planificación, Julio de Vido, para reactivar una invitación a los miembros del Congreso paraguayo para visitar las distintas instalaciones nucleares del país vecino.
Aclaró que no es que él, como canciller, está de acuerdo con las obras nucleares proyectadas para la vecina localidad de Formosa. “El canciller está preocupado”, precisó, invocándose. Sin embargo, resaltó, que Paraguay ni ningún otro Estado puede vetar los proyectos. “El convenio sobre seguridad energética nuclear obliga a que se facilite toda la información, pero nosotros, ni ningún Estado parte tiene derecho al veto”, dijo.
El ministro asegura que la Cancillería sigue muy de cerca el proceso y que les preocupa lo que pueda suceder en un futuro, “como preocuparía cualquier emprendimiento hidroeléctrico que pueda suceder una desgracia de la naturaleza, pero no es que el canciller está de acuerdo”(sic).
Informó que entre mañana y el jueves estará en Buenos Aires, para las negociaciones del Anexo C del Tratado de Yacyretá, y aprovechará para conversar con de Vido.
Insistió en que en ningún momento dijo que aprobaba el emplazamiento de una planta nuclear en Formosa. “Lo que dije es que estamos recibiendo toda la información que el gobierno argentino nos provee”, subrayó.
Recordó que las autoridades argentinas invitaron a los parlamentarios paraguayos para visitar todos los lugares donde hay instalaciones nucleares. Entre ellos, Bariloche, y la planta de Atocha en la provincia de Buenos Aires. “Todo abierto, nos dijeron y estamos trabajando en un nuevo marco de cooperación en el marco nuclear”, resaltó optimista.
Fuente: Ultima Hora
